}

Sedación ligera en UCI

La sedación es el estado de transición entre el individuo consciente y la pérdida de consciencia. Esta transición se produce como un continuo, sin etapas intermedias. De asociarse a una inhibición del estímulo doloroso hablaremos de sedoanalgesia.

La sedación es por lo tanto, un procedimiento de vital importancia en el paciente de UCI, permite la adaptación a terapias que pueden resultar muy incómodas y desagradables, como puede ser la ventilación mecánica invasiva, la realización de técnicas molestas y dolorosas, y la adaptación a un medio que en muchas ocasiones puede resultar hostil. Y se puede llevar a cabo mediante fármacos vía endovenosa o inhalatoria.

Las Guías recientes de sedación en las Unidades de Cuidados Críticos se centran en el manejo del dolor, agitación y el delirio (DAD). Estas guías recomiendan el uso de niveles de sedación más ligeros siempre que sea factible, para lograr los mejores resultados posibles para los pacientes definiéndose esa sedación ligera como una puntación en la escala RASS ≤ -2.

La “sedación ligera o consciente” implica una mínima depresión del nivel de consciencia, mantenimiento de la vía aérea y capacidad de responder a un estímulo verbal o físico. En la “sedación profunda” el paciente no recupera el nivel de consciencia con dichos estímulos, además puede acompañarse de una depresión de los reflejos protectores así como de la imposibilidad de mantener la vía aérea permeable. La sedación profunda innecesaria se asocia con escasos resultados a corto y largo plazo para los pacientes de las Unidades de Cuidados Críticos. Por otro lado, la sobresedación, en la cual un paciente es sedado más profundamente que el nivel objetivo, implica similares riesgos.

 

Proyecto Humanizando los cuidados intensivos

Humanizar los Cuidados Intensivos es centrarse aún más si cabe en el paciente en base a la mejor evidencia disponible, haciendo uso racional de recursos, incluyendo a los familiares y haciéndolos parte del proceso, recordando que la salud es un derecho fundamental de todo ser humano.

De esta necesidad se originó, en el año 2014, el nacimiento del Proyecto de Investigación Internacional “Humanizando los Cuidados Intensivos” (HU-CI), cuyo objetivo además incluye el servir de punto de encuentro entre pacientes, familiares y profesionales; difundir y acercar a la población general los cuidados intensivos y fomentar la formación en habilidades de humanización.

Entre las recomendaciones que sugiere este proyecto aconseja que la sedación sea ligera y que consista en evaluar la necesidad de sedación o no de cada paciente con el fin de ofrecer comodidad, manteniendo un nivel de sedación lo más superficial posible y usando la sedación profunda solo cuando está indicada y cuando la evidencia ha demostrado beneficios.